Cre(er)ar

¿Para quién estamos creando hoy? ¿Para quién estamos haciendo funcionar el cerebro creativamente hablando? ¿Diseñamos y modulamos ideas para un fin comercial/comunicacional, o para nuestro amado Behance?

Tiempo atrás, acompañados de una rica cerveza, junto a mi gran amigo Felipe Soto Ros (creativo de Grupo B&L), un simple chiste/anécdota, se convirtió en una bola de nieve y terminó siendo imaginariamente un spot, radial, gráfica y todo eso. La idea y lo que pasó en ese momento, fue genial.

Tengo la suerte de haber viajado un par de veces al Festival El Ojo de Iberoamérica (en Buenos Aires, Argentina) y entre tanta y tanta pieza que pude disfrutar y envidiar, creo que ésta, sinceramente no se alejaba mucho de estar ahí.

Puedo decir que fue una pieza que, por lejos, nos hubiera marcado como creativos. Pero nos dimos cuenta de que era una pieza para nosotros, para otros creativos, para publicistas, diseñadores y conceptualizadores en general y no para el consumidor del servicio y como sabrán, frente a eso, nada que hacer.

“Puta, está la raja, pero no creo que se entienda…”

Esa gran idea, es una de esas tantas que deben quedar guardadas en el cajón, bajo 800 llaves y que será utilizada cuando llegue el momento correcto.

Recién ahí me di cuenta de que quizás muchas veces pequé y quise hacer gráficas con un brutalidad de asesino serial, pero sólo para potenciar algo del cual muchas veces me ha jugado en contra. Un portafolio competitivo para el mercado.

Este breve relato coincidió con una época donde buscaba nuevas variables laborales, y cuando miraba mi portafolio decía “¿Quién me va a pescar con estas gráficas que; en primero lugar yo no hice, y en segundo lugar, son gráficas que no tienen el concepto plasmado, pues muchas son de retail? La foto linda, el título y el precio grandes y destacados...” Según yo y mi ignorancia, no eran nada más que eso.

Este punto era clave en mi búsqueda. Estaba desanimado porque eran gráficas que a mí, como redactor, no me ayudaban en nada para salir a buscar esa pega que tanto quería. Pero ¿saben? Mientras más postulaba, más "paz" sentía. Porque de tanto mirarlo, me di cuenta que mi portafolio está repleta de trabajos 100% diseñado y armado para el consumidor final y no para mí, nunca pensé en alimentar mi Behance, nunca me ha interesado y quizás nunca me interesará.

Me cuelgo del viejo slogan de la agencia iP21, (comandada por el gran César Bravo) “Diseñemos para la gente”. Diseñemos piezas para el o la que está afuera, en la calle, en los patios de comida, en el estadio. Diseñemos para la familia que está mirando la carta de un restaurant, para el viejito miope que no ve nada en el diario, para el niño que busca colores en supermercado, para los pitucos que buscan diferenciación con la bolsa de la tienda donde acaba de comprar, para el caballero y la señora que toman el metro a las 06:30 de la mañana y van cagaos de sueño leyendo el diario gratuito de turno y para el estudiante que tiene la cara pegada a Instagram y Tiktok.

Cuando se den cuenta que la creatividad que ustedes trabajaron funcionó y consiguió objetivos de brief y no sólo hizo acto de presencia en el medio, recibirán el premio más lindo de todos, un “Está la raja y además, funciona…”

Saludos.