Algunos recordarán que nuestros padres llegaban a estar 20 o más años en la misma empresa y eso era sinónimo de estabilidad, tranquilidad financiera/emocional, prestigio y por sobre todo, desempeño confiable en su labor. Hoy, para muchos, estar 2 años en el mismo lugar, significa estancamiento.
Cada vez somos más reemplazables por alguien que tiene exactamente los mismos atributos y habilidades. Cursos de google, de Meta, de Brother, de UX, capacitaciones de línea Adobe, años de experiencia, un lindo behance, etc. ¡Cada vez nos parecemos más! Por lo mismo, las agencias nunca más se vieron en la necesidad de implementar planes de retención de talentos. Porque estamos todos calibrados más o menos con las mismas habilidades.
Entonces los que caminamos por estos pasillos, ¿cómo podemos generar una mayor diferenciación de habilidades respecto a nuestros pares y así, convertirnos en talentos para retener?
Personalmente tengo muchas ganas de ser más que relevante para mi equipo y no uno más que si se va, nadie lo notaría en términos de desarrollo. Quiero tener un sello diferenciador y trabajo día a día por ello. Me imagino que muchos de ustedes también.
Siento que el tiempo nos ha dado claras señales de cómo podemos comenzar a moldear un nuevo perfil de creativo. Y es que éste, nos empuja a conocer, y si quieres, disfrutar también los ritmos de otras áreas y ramas; como las comerciales, el marketing, la planificación estratégica, cuentas, producción, los medios, todas las nuevas áreas que nacen día a día, la poesía, la lectura filosófica, la experimentación robótica, la guitarra, el canto, la danza, el deporte, el cine, la fotografía, el arte contemporáneo, etcétera. Ya no podemos vivir sólo de las supuestas buenas ideas.
Ser creativo no significa aparentar estar chiflado, creerse artista, usar camisas psicodélicas, pitillo arremangando, calcetines de piñas, tener las zapatillas New Balance de 6 colores o de creer ser el único que "piensa distinto" en la agencia.
Antes de ser redactores, directores de arte, somos profesionales de una de las áreas más dinámicas, versátiles y entretenidas que puede haber y debemos estar agradecidos de esas bondades. Por lo mismo, también hay que respetarla, cuidarla y complementarla con las otras ya mencionadas.
El creativo cambió, ya no es el gritón, despeinado que sube los pies a la mesa porque es el dueño de la creatividad. Es el que domina mejor la adaptación y la versatilidad del conocimiento. Es el que tiene la capacidad de leer un reporte, interpretar los gráficos, modelar un funnel y desarrollar la gran idea. Además de inspirar a la mejora continua de sus pares. La excelencia, las habilidades y el conocimiento se comparte también.
La lucha por buscar variables que nos diferencien uno de los otros debe ser continua. Y léase bien esto por favor, en el buen sentido de la palabra, pero debemos hacernos más competitivos y diferentes entre nosotros.
Amigos, lo único que busco transmitir es que, la creatividad ya no puede ser sólo algo estético o "divertido" en la pieza. También debe ser calculadora, fría, numérica y resolutiva. Las decisiones creativas pasan primero por una lectura analítica y después insight o la frase linda. No podemos avanzar si no tenemos luz verde del gráfico con porcentajes en las manos.
Entendí que como creativo, para poder romper las reglas primero debo conocerlas, estudiarlas y vivirlas.
No vean esta “milicia” del aprendizaje de otras temáticas como un castigo o una obligación, véanla como herramientas de crecimiento personal, profesional y para que de verdad, estemos con trabajo por las habilidades desarrolladas en el tiempo, no porque tenemos un lindo portafolio que, por cierto, es compartido con otros profesionales/amigos o porque tenemos un amigo DC en la agencia.
Saludos.